Tal día como hoy...(2)

Un viernes como hoy, Rex H. Clementine ponía el plan que llevaba dos años, tres meses y 1 día (con sus correspondientes pausas para ir al baño, claro) preparando. Iba a dar el golpe perfecto con el que desvalijaría el casino más importante de Las Vegas, el Roxbury Royal Sunshine Excalibur at night. Nada podía fallar, había reclutado al equipo perfecto: Un señor cojo de Ohio que podía deletrear al revés la palabra anticonstitucional, un matón que sirvió a las ordenes del primo del amigo del nieto de Al Capone, un carterista capaz de robar cualquier cartera que no sea de color rojo, una camarera bizca de Kentucky capaz de preparar un café en medio minuto y un cocinero de Nuevo México capaz de imitar a Liza Minelli a la perfección. Lo que no contó, es que, en el momento de irrumpir en la caja fuerte del casino, coincidió con la visita guiada del grupo asistente a la decimonovena convención de guardias de seguridad, ex convictos, expedientados por violencia brutal y no llorar al ver Bambi. Rex H Clementine, logró escapar con vida, que no ileso, gracias que el grupo pensó que era un evento preparado por el casino para satisfacer las ansias de violencia gratuita de los asistentes a la convención.